Comunicados no deseados

 
 
¿Cansado de recibir correo basura, spam o llamadas comerciales? ¿Te preguntas cómo consiguen las organizaciones tus datos y cómo puedes impedir que contacten contigo?
 

El envío de información comercial de forma personalizada constituye un hecho cada día más habitual en nuestra sociedad de consumo, y en ella se basan muchas de las actividades económicas que desean promocionar sus productos o servicios. A veces esta información puede resultar de utilidad para las personas pero, sin embargo, en demasiadas ocasiones estos envíos comerciales no solicitados suponen una continua molestia, cuando no una intromisión en la privacidad de las personas, si nuestros datos hubiesen sido obtenidos de forma ilegítima.

Un estudio realizado en mayo de 2012, por el Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno Vasco, en colaboración con la Agencia Vasca de Protección de Datos, pone de manifiesto que el 67% de las personas consultadas, que utilizan correo electrónico, reciben comunicados no deseados, lo que se conoce como SPAM, que es un texto o una información que se envía de forma masiva a personas que no lo han solicitado.

El SPAM o correo basura supone, según algunas estadísticas, el 80% del correo que circula en Internet.

Qué debo saber:

  • El envío de comunicados comerciales por vía electrónica, sea por correo electrónico o por SMS al móvil, no es ilegal pero requiere la existencia de una relación comercial previa con nosotros, o bien haber otorgado nuestro consentimiento para ello.
  • Nuestros datos personales pueden proceder, además de dicha relación comercial preexistente, de lo que se denominan “Fuentes accesibles al público”. Las fuentes accesibles al público con fines publicitarios son, principalmente, las guías telefónicas, aunque también pueden serlo los directorios profesionales, los diarios oficiales y los medios de comunicación social.
  • Además, las empresas que se dediquen a publicidad pueden constituir ficheros con datos de aquellas personas que voluntariamente hayan proporcionado sus datos para recibir información comercial o publicidad. Esto suele ocurrir cada vez que proporcionamos nuestros datos para participar en algún concurso, sorteo u otra actividad promocional o gratuita, por lo que es conveniente ser cauto al respecto.
  • En cualquiera de estos casos existe la posibilidad de oponernos al tratamiento de nuestros datos para fines publicitarios por parte de quien los tenga. Además, existen mecanismos para manifestar nuestra oposición general a recibir información comercial, como son las denominadas “Listas Robinson”.
  • También existen fuentes ilegales de información y tratamientos fraudulentos de nuestros datos, ante los cuales deberemos estar atentos e informados y adoptar otro tipo de medidas más activas de prevención.

Qué puedo hacer:

  • Solicitar la exclusión de los directorios telefónicos. Hoy en día el hecho de figurar en las guías telefónicas tiene menor utilidad que en el pasado, con lo cual uno puede preferir no aparecer en ellas y así evitarse el recibir publicidad no deseada. Puede solicitarse la exclusión de los directorios telefónicos o los servicios en línea de consulta de abonados al prestador del servicio, lo cual tendría efecto a partir de la siguiente edición.
  • Leer siempre la letra pequeña. Cuando facilitas tus datos personales en concursos, sorteos, etc., debes leer siempre la letra pequeña, donde se especifica si la organización utilizará tus datos para fines comerciales o transferirá los mismos a otras organizaciones.
  • Cuidar el consentimiento otorgado cuando se nos solicite mediante la marca de alguna casilla en los vales, cupones o formularios de prospección comercial.
  • Indicar al remitente nuestra oposición. Los correos electrónicos de promoción comercial deben venir identificados como tales y ofrecer la opción de no recibir más comunicados no deseados mediante un procedimiento sencillo y gratuito (correo electrónico de respuesta o visita a página web)
  • Suscribirse a las “listas Robinson”, servicios de exclusión publicitaria de aplicación a aquellas empresas de publicidad adheridas a estos servicios de exclusión publicitaria.
  • Ser precavidos a la hora de proporcionad nuestros datos de contacto en webs o sitios desconocidos, responder a mensajes en cadena o caer en engaños de “ingeniería social”

Casos reales de Comunicados no deseados